El Gobierno tiene previsto enviar a Bruselas antes del 30 de abril, una actualización del Programa de Estabilidad que comprende el periodo 2019-2022. Todos los países están ordenados a mandar una actualización de dicho programa a la comisión Europea antes de la fecha prevista. El objetivo es revisar sus cuentas independientemente del cambio electoral al domingo 28 de abril.

Así, un año más el Gobierno cumplirá la obligación europea de que todos los estados pertenecientes a la Unión Europea, deberán mandar a la Comisión Europea sus Programas Nacionales de Reformas y su Programa de Estabilidad. El final de este mandato es coordinar las políticas económicas nacionales y lograr los objetivos globales acordados por la Unión Europea.

Gracias a este programa, además de la Comisión Europea, los ministros de economía analizan si los Estados miembros están bien encauzados en relación a los objetivos propuestos a medio plazo. Para medir este parámetro se basan en el valor de referencia del gasto y el análisis del saldo estructural.

Pedro Sánchez planteaba las metas al 1,8% del PIB este año, el 1,1% en 2020 y el próximo año al 0,4%. Por su parte, María Jesús Montero, ministra de Hacienda, ha señalado que el hecho de haberse denegado el proyecto presupuestario del Gobierno y la prórroga de Presupuestos de 2018, provocan en la economía del país un déficit público del 2,3% o 2,4% del PIB. Ante dicha situación, tras las elecciones del próximo mes de abril, el Ejecutivo tendrá que realizar una juste superior a 13.000 millones de euros.

Aun así, el Gobierno tendrá que incluir en el Programa de Estabilidad 2019-2022 un avance del llamado “sprending review” para analizar de una manera exhaustiva el gasto en las administraciones públicas. Una vez haya pasado a examen, la Autoridad Fiscal hará público todos los componentes del estudio realizado.