A partir de este lunes la mitad de la población española podía disfrutar más libertades al confinamiento obligatorio causado por la covid-19, al pasar a la fase 1 del plan de desescalada.

Y el domingo se confirmó con el registro del menor número de muertes por coronavirus, de 143, desde mediados de marzo.

El jefe de emergencias sanitarias de España, Fernando Simón, dijo en una rueda de prensa que “la evolución sigue el camino favorable observado en estos últimos días”.

España, uno de los países europeos con más muertes por la pandemia, con más de 26 mil, aplicó un confinamiento estricto que detuvo la actividad comercial, turística, cultural y social.

Pero, residentes de grandes ciudades como Madrid y Barcelona, no han pasado a la siguiente fase.

En las regiones que sí hay relajación de las normas, hasta 10 personas podrán reunirse y también se permitirá a la gente moverse libremente por su provincia.

Las Islas Canarias y Baleares, en fase 1, podrán abrir los bares, restaurantes y tiendas con capacidad reducida; mientras que los museos, gimnasios y hoteles abrirán sus puertas por primera vez en casi dos meses.

Además de Madrid y Barcelona, Valencia, Málaga y Granada permanecerán en la fase 0, con las limitaciones sociales y económicas que eso significa.