Los pequeños hurtos cuestan al año cerca de 300 millones a las arcas públicas, mientras que esta cantidad aumenta a 1.800 millones a los comercios que sufren estos delitos. Por este motivo se ha decidido endurecer los castigos contra los ladrones que se dedican a robar todos los días, aquellos que reincidan verán como su castigo cambia.

El Código Penal sufrirá un cambio y aquellos que sean reincidentes se enfrentarán a penas que van de los 6 meses a los 18 meses de cárcel. Una vez superados las tres detenciones por hurtos, aunque sean de carácter leve, ya existirá una pena condenatoria de cárcel. Un punto importante es que, el montante total del robo debe superar los 400€.

Desde la Confederación Española de Comercio (CEC) celebran este cambio del Código Penal, llevaban muchos años reclamando un cambio, estaban hartos de unos delitos que les cuestan al año 1.800 millones de euros al sector.