El Ilustre Colegio de Abogados de Valencia (ICAV) (España) ha celebrado las bodas de oro y diamante de sus colegiados en uno de los actos más entrañables del ICAV con los letrados más veteranos del Colegio.
En realidad, su decano, Rafael Bonmatí, acompañado de los diputados de la Junta de Gobierno, han recibido a los letrados que cumplían 50 y 60 años en el ejercicio de su profesión, para hacer un merecido reconocimiento a sus trayectorias profesionales.
Bonmatí ha explicado en su discurso inicial que “somos abogados porque estamos con las personas, hacemos nuestros sus problemas. Siguiendo esos valores que han inspirado vuestra larga trayectoria, esta Junta hace todo lo posible por dignificar el trabajo de abogado”.
Acto seguido se entregaron las placas y las insignias correspondientes a cada uno de los homenajeados. El representante de los letrados veteranos del Colegio, D. Vicente Escrivá, ha clausurado el evento con las palabras “ser abogado es un orgullo, y serlo durante 50 o 60 años, es todo un logro”.
Escrivá ha añadido hablando de la profesión en el siglo pasado que “ahora ya no puede ser así, es necesario que nuestra profesión se especialice con el campo jurídico tan extenso que existe”.
Por otra parte, el ICAV homenajeó a los abogados fallecidos en el año 2017. De hecho, la celebración ha tenido lugar el viernes primero de diciembre. El evento se ha celebrado en la Sala de la Muralla del ICAV en la que, a pocos minutos de comenzar, ya no cabía nadie más.