Miguel Ángel Galán, el hombre que logró expulsar a José María Villar de la Real Federación Española de Fútbol, se propone ahora hacer lo mismo con Luis Rubiales tras el escándalo que ha salpicado a este y al futbolista del F. C. Barcelona, Gerard Piqué. Galán ha llevado el caso ante la Fiscalía Anticorrupción, donde denuncia cinco supuestos delitos cometidos por el Presidente de la RFEF, Luis Rubiales. Los delitos por los que le acusa son corrupción entre particulares, corrupción en los negocios, administración desleal, prevaricación administrativa y cohecho.
Galán se ha manifestado en torno a la organización de la Supercopa de España en Arabia Saudí: «Rubiales en ese acto ha ejercido como un agente colaborador de la Administración pública. El contrato, por ello, tenía que haberse sacado a concurso público. En esto no caben comisiones ni mordidas ni nada. La Federación no es una empresa privada ni una sociedad limitada que pueda hacer un negocio jurídico normal en este caso concreto», precisa. «No puede llevarse la Supercopa donde quiera, porque es una función pública del Consejo Superior de Deportes».
En un principio, el CSD ha criticado la falta de moral en todo este negocio, pero ha reconocido que no se ha cometido ninguna ilegalidad.