La Abogacía española quiere aprovecharse del proyecto del cual es miembro llamado Alianza del Pacífico. Los países que están incluidos en esa alianza son Chile, Perú, Colombia y México, los cuales representan más del 52% del comercio de la región y el 37% del PIB.
Estos países tienen bien afianzada la seguridad jurídica y entre las regiones que son miembros observadores de esta alianza se encuentra la Unión Europea. Por ejemplo, España, que también es miembro observador, cuenta con avanzados acuerdos de asociación con estos países, que favorecen la libre circulación de bienes, servicios e inversiones.
Por eso, la Abogacía española tiene una serie de ventajas las cuales quiere explotar. La cultura, el idioma y los sistemas jurídicos similares suponen una gran base de trabajo conjunto y entendimiento.
Además, la seguridad jurídica junto a la facilitación de prestación de servicios, intercambio de mercancías y favorecimiento de inversiones crean el ambiente perfecto para el ejercicio de los abogados a un lado y otro del Atlántico. De hecho, los acuerdos comerciales entre los países necesitan también un buen asesoramiento jurídico, con lo que la Abogacía tiene la oportunidad de abrirse las puertas a Iberoamérica.
Por otro lado, las Abogacías de España y Cuba han participado en la jornada de ‘Intercambio entre la Organización Nacional de Bufetes Colectivos (ONBC) y la Abogacía Española: proyección profesional y retos ante la globalización’ que han tenido lugar en La Habana (Cuba).