La Agencia Tributaria ha emitido una operación contra la economía sumergida de los distribuidores chinos. De hecho, es una acción contra el fraude fiscal y la economía sumergida en el sector de la importación, distribución y venta de productos que vienen desde China hasta España.
Además, los funcionarios han realizado entradas y registros en 61 naves de polígonos industriales de once comunidades autónomas, entre los que se encuentran Cobo Calleja en Fuenlabrada (Madrid), El Carrús en Elche (Alicante) y Badalona Sud en Barcelona. Por consiguiente, parte de las actuaciones han contado con la colaboración de la Policía Nacional, la Guardia Civil o los Mossos d’Esquadra.
En realidad, los 370 funcionarios de la Agencia Tributaria, repartidos en distintos departamentos del organismo de inspección, equipos de fraude organizado de la ONIF, unidades de auditoría informática y de vigilancia aduanera, han sido los encargados de hacer las inspecciones.
La operación ha sido denominada ‘Dragón‘ y es la quinta que realiza la Agencia Tributaria sobre productos chinos sin declarar, tras las realizadas en 2013, 2014 y 2016. Precisamente la llevada a cabo en noviembre de 2014 en Madrid, bajo el nombre de operación ‘Juguetes’, y cabe destacar que, el importe total del fraude fiscal cometido en aquella ocasión superó los 100 millones de euros.
Por otro lado, los inspectores de Hacienda han señalado que la Agencia Tributaria está ‘al límite’ de su funcionamiento operativo, como consecuencia de la carencia de medios. Además, la Organización Profesional de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) ha denunciado la ‘actitud irresponsable’ del Gobierno en la lucha contra el fraude fiscal.