La Fiscalía de Madrid ha denunciado a tres médicos de una residencia de ancianos privada de Madrid, Orpea Madrid Buenavista, por el fallecimiento de un anciano por deshidratación. Han sido acusado de homicidio imprudente y omisión de del deber de socorro.
Los doctores K. S. R. J., D. J. A. C. y A. M. D. S., están acusados de no realizar el seguimiento oportuno a un paciente que ya había presentado en el pasado episodios de deshidratación y que sufría una visible falta de masa corporal. El Ministerio Público sostiene que el usuario falleció “fruto de la omisión de un adecuado sistema de hidratación”.
Este hecho sucedió durante la pandemia, los tres doctores habituales de la residencia tuvieron que cogerse la baja laboral por lo que la empresa se vio en la obligación de contratar a tres nuevos doctores. Los tres denunciados no vieron la gravedad de la situación del enfermo A. A. M., este sufría una deshidratación severa y padecía una infección respiratoria por COVID-19, “por lo que no pautaron un adecuado tratamiento y no activaron el protocolo vigente”.
Los médicos que le atendieron en primera instancia presentaron un diagnóstico de posible malnutrición, un problema que ya había sido detectado meses antes por lo que el Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla pautó un control y seguimiento del paciente y que acudiera a urgencias en caso de empeoramiento de la sintomatología clínica.
A pesar de ello, no consta que los tres médicos denunciados hicieran un seguimiento al paciente hasta que el 24 de marzo las auxiliares informaron de que el usuario parecía presentar fiebre, subraya la Fiscalía.