Las nuevas medidas fiscales de las que echa mano el Gobierno español para frenar el incesante aumento de la factura eléctrica han llevado a un enfrentamiento inédito con las centrales nucleares.
El nuevo paquete de medidas hace un ajuste de la fiscalidad que incide en el importe final del recibo, reduciendo hasta final de año el tipo impositivo de este tributo al mínimo permitido.
Por otro lado, también se extendió la suspensión del Impuesto sobre el Valor de la Producción de Energía Eléctrica durante el cuarto trimestre y mantiene sin cambios la reducción operada en el IVA (del 21% al 10%) hasta el 31 de diciembre.
Son tres los tributos afectados por las medidas aprobadas relacionadas con el servicios eléctrico: El Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), cuyo tipo impositivo aplicable pasa del general del 21% al reducido 10%; el Impuesto sobre el Valor de la Producción de Energía Eléctrica (IVPEE), que pasa del 7% al 0% durante el tercer y cuarto trimestre de 2021, y el Impuesto Especial sobre la Electricidad (IEE), que desde el 16 de septiembre hasta el 31 de diciembre de 2021, reduce su tipo impositivo del 5,1% al 0,5%, mínimo permitido por la Unión Europea.