Las limitaciones personales del solicitante y el nivel cultural serán tomados en cuenta en pruebas que se realizan a extranjeros que solicitan la nacionalidad. El Ministerio de Justicia informó que la medida es el resultado de una consulta pública abierta.
En el proceso para el cambio del Reglamento que regula el procedimiento de adquisición de la nacionalidad por residencia fueron recibidas opiniones desde diferentes sectores. Se mantendrán las pruebas de conocimiento del idioma español, Constitución y cultura y sociedad españolas.
El Ministerio justificó que tal sistema de acreditación “no puede ser idéntico para todas las personas sin excepción alguna, por cuanto dejaría fuera del acceso a la adquisición de la nacionalidad a las que, por su escaso nivel cultural, o bien por sus limitaciones personales, se vieran en la imposibilidad de alcanzar el nivel de conocimientos necesario para superar las pruebas”.
Se establece respetar el principio que establece el artículo 14 de la Constitución española, de no discriminación por razón de nacimiento, edad -corta o avanzada-o cualquier otra condición o circunstancia personal o social. De hecho, el Ministerio entiende que es necesario que aquellas personas que no sepan leer ni escribir o tengan dificultades de aprendizaje “dispongan de los apoyos y de los ajustes razonables que les permitan concurrir en condiciones de igualdad efectiva”.
Se supo por fuentes de la Dirección General de los Registros y del Notariado que la prueba podría efectuarse mediante acta notarial, que acompañará a la solicitud de dispensa.