Una trabajadora que testificó a favor de una compañera en un juicio fue despedida por tal acción, pero el Tribunal Superior de Justicia de Galicia anuló la decisión empresarial.

El caso corrió en la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Galicia, cuyos magistrados fundamentaron con la garantía de indemnidad del artículo 24 de la Constitución Española.

Este enunciado reconoce el derecho fundamental a la tutela judicial y no ampara las represalias contra quien testifica judicialmente, pero sí encuentran amparo en el artículo 20.1.d) de la Constitución Española.

De acuerdo a lo que se lee en la sentencia del 16 de enero de 2020, la trabajadora despedida aportó un fuerte indicio de prueba de haber sido despedida como represalia por haber testificado en un juicio seguido por otra trabajadora.

En el caso, la inmediación temporal entre el fallo de la sentencia dictada en el proceso en el cual testificó la trabajadora demandante y la comunicación de su despido, menos de un mes, supone un indicio fundado de la existencia de represalia por el hecho de haber testificado.