Ninguno de los candidatos para asumir la presidencia del Tribunal Supremo de Canarias tuvo los votos exigidos para ser nombrados, así que por ahora esa plaza quedara desierto.
Tras el intento fallido, el pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) devolvió a la Comisión Permanente la terna de candidatos a la presidencia del TSJ-Canarias.
Para ser electo, el aspirante debe conseguir la mayoría de tres quintos exigida ni en la primera votación ni en las tres consecutivas realizadas a continuación.
El artículo 44 del Reglamento de Organización y Funcionamiento del órgano de gobierno de los jueces establece que cuando en las votaciones para la provisión de cargos judiciales o gubernativos que competan al Consejo ninguno de los candidatos alcance la mayoría exigida, “se celebrará una nueva votación entre los dos que hubieren obtenido mayor número de votos en la primera. Si ninguno de ambos alcanzare la mayoría antes expresada, después de tres votaciones consecutivas, se entenderá denegada la propuesta, que se devolverá al órgano competente para que formule otra nueva”.
Pedro Joaquín Herrera Puentes consiguió 9 de los votos del Pleno del CGPJ y Juan Luis Lorenzo Bragado, 12. Ninguno de los dos llegó a los 13 preceptivos.