El estado de California, en Estados Unidos, ha iniciado una querella contra la fabricante de coches eléctricos Tesla, propiedad del multimillonario Elon Musk, por discriminación racial.
De acuerdo a lo informado a la prensa, la planta de Tesla en el área de la bahía de San Francisco, se ha convertido en un “lugar de trabajo segregado racialmente”.
El Departamento de Igualdad en el Empleo y la Vivienda del estado de California detalló que recibió cientos de quejas de trabajadores negros de esa planta, en la ciudad de Fremont.
Los empleados aseguraron que fueron objeto de insultos raciales y que recibieron un trato no igualitario en las asignaciones de trabajo, las sanciones, las remuneraciones y los ascensos.
No es la primera vez que Tesla se ve envuelto en este tipo de denuncias en California. Ya en 2021, un jurado federal en California le ordenó pagar 137 millones de dólares, por daños y perjuicios, a Owen Díaz, un hombre negro que trabajaba en el mantenimiento de ascensores.