Google recibió la orden de un Tribunal de Australia de proporcionar los datos de un usuario que de forma anónima hizo una mala calificación de un dentista.
El gigante tecnológico tendrá que compartir nombres, números de teléfono, direcciones IP y metadatos de ubicación del desconocido al odontólogo que calificó de forma negativa.
La medida del Tribunal Federal de Australia también obliga a Google a proporcionar información sobre otras de sus cuentas con los nombres completos y las direcciones de correo electrónico, que podían originarse en la misma dirección IP, cuando fue escrito el comentario.
La demanda la introdujo Matthew Kabbabe, cirujano dental, que está intentando demandar a un usuario, conocido solo por su alias, ‘CBsm 23’, por difamación, siendo el único comentario negativo entre todas las reseñas dejadas en Google a finales del año pasado.
En una nota publicada por The Guardian, se indica que Kabbabe le dijo al Tribunal que en noviembre solicitó a Google que eliminara el comentario negativo, pero la compañía lo rechazó. Luego, a principios de este mes, pidió la información personal del citado usuario, a lo que también se negó.