Los abogados y profesionales del sector sanitario en Valencia reivindican mejoras en la seguridad de los centros ya que son muchos los trabajadores que sufren agresiones por parte de los pacientes.
Por ello, se ha aprovechado la celebración del I Congreso de Derecho Sanitario de la Comunidad Valenciana para reclamar la instalación de alarmas y cámaras en los centros médicos donde se dan más casos de violencia y agresiones hacia los profesionales sanitarios.
El letrado David Soler ha recalcado la “necesidad” de aumentar las medidas de seguridad “en centros con alto índice de agresiones, como poner alarmas y botones de pánico, así como establecer una comunicación directa con la policía para que se actúe rápidamente al detectarse una agresión”.
Además de las agresiones, también se han comentado en este Congreso algunas de las novedades jurisprudenciales. La magistrada de la Audiencia Provincial de Valencia, María Dolores Hernández, ha repasado qué es la imprudencia médica y ha matizado que existen muchas reclamaciones médicas pero “muy pocas sentencias condenatorias en el ámbito penal“.
La responsabilidad penal no es muy común en el ámbito médico-sanitario, “pero sí muy grave y que afecta especialmente, ya que muchas veces inhabilita para el ejercicio de la profesión”, ha asegurado la magistrada.
Además, la presidenta del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), Pilar de la Oliva, ha afirmado que “es importante que los profesionales que de alguna manera formamos parte de este sector, hagamos aportaciones sobre problemas comunes. La pluralidad es positiva para enriquecernos”, ha aseverado.